En una entrevista difundida ayer en Estación Noticiosa, un entrevero de sandeces se le escuchó decir a Rubén Loayza, quien lamentablemente para desgracia de Ayacucho, es consejero, ya que no solo demuestra pobreza moral, sino también desconocimiento total del papel que le toca cumplir. Al escucharlo Luis Larrea no se quedó callado y sugirió que Ruben Loayza “lea, aprenda porque es un funcionario”
Loayza afirma que debiera absolverse a su benefactor Wilfredo Oscorima, ya que no sería nada legítimo que se le saque del cargo a quien ha sido “elegido legítimamente, aunque sea por un voto”; algo que también lo dijo con tanta seguridad, es que el delito que ha cometido no es grave, “ni siquiera es por malversación de fondos”, señaló y lo peor se atrevió a afirmar que la sentencia de Wilfredo Oscorima y su ratificación obedecería a una “persecución política”. Y que para mantener la estabilidad política se le debería absolver.
Ante todas estas declaraciones Luis Larrea, afirmó que este señor en su condición de funcionario y para opinar con propiedad debiera leer, aprender. Nada tiene que ver su elección con lo jurídico, porque WON ha sido sentenciado por la comisión de delitos , no importando si son leves o graves.
Larrea Morales señaló que tanto Víctor De La Cruz como Ruben Loayza, ambos funcionarios públicos debieran ser procesados por faltas al Código de Etica de la Función Pública, Ley 27815, por cuanto no están cumpliendo con el principio de respeto al proceso judicial en el que se encuentra el gobernador regional. En cuanto al de Probidad, el que señala que debiera el funcionario “ actuar con rectitud, honradez y honestidad, procurando satisfacer el interés general y desechando todo provecho o ventaja personal, obtenido por sí o por interpósita persona”. Ellos no están actuando así, por el contrario están defendiendo intereses particulares, intereses de un individuo que está siendo juzgado como persona.
De la Cruz debiera ser denunciado para que indique las veces que realizaron gestiones públicas a base de botellas de Wisky y pagos de favores; al parecer WON regaló relojes rolex, retablos y botellas de Wisky, mezclando su dinero con el dinero público para garantizar no solamente una gestión, sino lograr el blindaje del que estaría gozando ahora, que en más de 4 meses no es capturado. “Es el resultado de los rolex, wiskys y retablos”, señaló Luis Larrea.