Las constantes deficiencias -por no llamarlas irregularidades- en la elaboración del expediente técnico para el proyecto del estadio Cuna de la Libertad Americana podrían provocar la reversión de los S/100 millones que, en pleno escándalo de los Rolex, Dina Boluarte transfirió al Gobierno Regional de Ayacucho de su wayki Wilfredo Oscorima.
Uno de los postores del proceso solicitó al gobernador elevar el caso al Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE) para emitir un pronunciamiento sobre el pliego de absolución de consultas y observaciones. El objetivo es evitar la paralización de la obra debido a deficiencias en el expediente, un problema que suele provocar ampliaciones de plazo y sobrecostos en la mayoría de obras públicas.

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La observación que hace el postor, sobre el Certificado de Inexistencia de restos arqueológicos- CIRA, esta visible en el expediente técnico al que han tenido acceso todo los postores, pero algunos al igual que los funcionarios del Gobierno Regional de Ayacucho, se hacen de la vista gorda.
La observación se refiere a la recomendación que se hace en el Informe de reconocimiento Arqueológico: Recomienda la Implementación del PLAN DE MONITOREO ARQUEOLOGICO y deniega la EMISIÓN DEL CIRA AL TENER INFRAESTRUCTURA PREEXISTENTE en el Componente A.
El Componente B no cuenta con CIRA, tienen coordenadas diferentes al polígono del complejo deportivo, y no existe recomendación de implementar el PLAN DE MONITOREO ARQUEOLÓGICO.
Esta omisión es relevante, pues si durante la excavación de 625 metros subterráneos para la reubicación de estructuras de alta tensión se encontraran restos arqueológicos, no existirían medidas previstas ni presupuesto para solucionarlo.
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La Contraloría alertó previamente sobre la falta de titularidad del terreno y otras situaciones adversas (27 en el informe de hito de control 19823-2024)en el expediente técnico, expediente que costó más de 2 millones. Esto llevó a que el proceso fuera declarado nulo por violar los principios de transparencia y publicidad el 23 de septiembre. La nueva convocatoria lanzada el 4 de octubre tiene un valor referencial de S/382 millones y está en proceso de absolución de consultas. La presentación de propuestas será hasta el 8 de noviembre.
Esta sería la tercera vez que el proceso podría caer, apuntando a una gestión deficiente de funcionarios cuestionados, como el administrador Wilman Salvador, protegido por Oscorima. Si eso sucede, aunque el proceso podría continuar, los fondos serían devueltos al MEF. En ese caso, el gobernador tendría que solicitar nuevamente el presupuesto en 2025. ¿El Ministerio de Economía transferiría nuevamente los 100 millones? ¿Tendrían que prestarse nuevos relojes y joyas?