El Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA) anunció que, en el marco de sus funciones establecidas en el Sistema Nacional de Inocuidad, viene cumpliendo con capacitar a los productores para el uso adecuado de plaguicidas y la consecuente producción de alimentos sanos y libres de contaminantes.
Desde el 2011, el SENASA ejecuta un plan anual de monitoreo de alimentos; con el cual, ha logrado determinar que una de las principales causas de aparición de residuos químicos en los alimentos se debe a que “el productor no respeta el periodo de carencia”, tiempo (en días) que debe transcurrir entre la última aplicación de un plaguicida y la cosecha de los productos agrícolas.
En ese sentido, la autoridad en sanidad agraria ha venido implementando una serie de acciones desde el campo; logrando capacitar a 14 264 productores agropecuarios mediante charlas convencionales y entrenar mediante “Escuelas de Campo” a 82 812 agricultores peruanos.
Como alternativa al uso de plaguicidas, el SENASA también ha implementado más de 100 000 hectáreas con controladores biológicos, y a su vez, se ha emprendido campañas informativas en principales valles agrícolas del país.
Caso: “Cebollita china”
Tanto la cebolla china, el tomate, las frutas y otros productos agrícolas están expuestos a contener residuos de plaguicidas, si es que el productor no respeta el periodo de carencia; en ese sentido, es importante remarcar que existe una brecha por cubrir en la vigilancia y control de alimentos que se comercializan en mercados.
Y es que, de conformidad con lo dispuesto en la Ley N°27972 -Ley Orgánica de Municipalidades; “el control y vigilancia del comercio interno de alimentos agropecuarios de producción están a cargo de los Gobiernos Locales”. Acciones que no se vienen ejecutando, dejando la puerta abierta para que todo tipo de alimentos sean ofertados en los mercados.
Desde el SENASA, indican que no todas las cebollitas chinas tienen residuos de plaguicidas. En el mercado también existen productores que participan de las Escuelas de Campo del SENASA y cumplen con el periodo de carencia, en consecuencia, cosechan alimentos sanos e inocuos.