Llegamos al Bicentenario de la Batalla de Ayacucho con la presencia de cientos de visitantes de otras ciudades del país y del extranjero, quienes llegaron por los Juegos Bolivarianos, una fiesta deportiva que se inauguró un día después de la fecha prevista. En lugar de ello, fueron testigos de la protesta del pueblo debido a la coyuntura actual, que rechaza a la presidenta, quien tiene en su haber 10 muertos ayacuchanos y 40 más en otras ciudades. Por ello, y por otros motivos, su aprobación es de apenas un 3%.
Tras ver los escenarios deportivos y la Villa Bolivariana, todos inconclusos, la indignación contra los gobernantes y los congresistas creció aún más. Estos últimos aprovecharon estas obras para pasearse por ellas, tomarse fotos y publicitar un supuesto avance ‘a toda máquina’ y ‘listos ya para los juegos’. Sin embargo, la realidad era otra, algo que algunos medios alertaron, pero que, como siempre, los seguidores de los gobernantes defendieron. Fue la intensa lluvia que cayó un día antes la que demostró lo mal hechas que están estas obras. Las cámaras que las enfocaron también evidenciaron lo inconclusas que están, lo que llevó a la destitución del responsable del Proyecto Legado, encargado de la organización de los Juegos Bolivarianos. Aclarar en este punto, que ´la congresista Margoth Palacios, tuvo la atinada idea de inspeccionar de manera imprevista dichas obras, comprobando que estaban inconclusas, incluido el Skatepark.
AUTORIDADES, UNA AUSENTE Y LA OTRA LAVÁNDOSE LAS MANOS
Como no podía ser de otra forma, el gobernador regional de Ayacucho no dio la cara en la inauguración, probablemente para evitar el abucheo de la población, por su pésima gestión y por la obra inconclusa del escenario donde se realizó la inauguración (según contraloria un avance de 38%). En cambio, el alcalde de Huamanga sí estuvo presente, luego de lavarse las manos y culpar únicamente a Legado por la mala organización. Olvidó sus numerosas publicaciones y fotos de su recorrido por las obras, donde supuestamente supervisaba lo bien que estaban y el gran avance que tenían. Además, se jacta de haber gestionado más de 150 millones y de haber confiado ese presupuesto a Legado. La realidad es otra: la gestión correspondió a las autoridades anteriores, y el presupuesto no fue confiado por la municipalidad ni por el alcalde, sino por la PCM.»
Aquí agregamos también al congresista Germán Tacuri, el que siempre se abstiene en el congreso, le basta con recibir su buena remuneración y ponerse al servicio de quienes mandan en ese poder del estado. Idem se publicitó en su cuenta de Facebook, visitando las obras, tomándose fotos, con su casco blanco y todo afirmando que estaban con buen avance y que todo estaba bien.
¿ A DONDE SE VAN LAS ENTRADAS?
Tal como se aprecia en las fotos y videos, los escenarios están vacíos, por lo que nos preguntamos y a dónde se fueron las entradas, que se sabe que están agotadas en todos los escenarios y hasta el último día de presentación. Cómo se explica eso? Alguien tiene que responder.
MANCHADO Y OPACADO POR LA CORRUPCIÓN
Si pues, ya que desde la adjudicación de la buena pro para la ejecución de la Villa Bolivariana, se alertó de todo el historial de las empresas que se hicieron de ella, entre ellas la empresa de la socia política de Wilfredo Oscorima, cuyos antecedentes no eran nada halagueños, y aún así, pese a reclamos y presuntas irregularidades en el proceso se la dieron. Hoy lamentamos, como en casi todas las obras de Ayacucho, el incumplimiento, y la mala calidad de ellas.